Palabras alusivas a la graduación de la primera generación de la Maestría en Educación Básica de la UPN095 Azcapotzalco

Rosa Eugenia Álvarez Jurado*

Alfredo Zalce

Buenas tardes Maestra  y profesora Nancy  Benítez, Directora de la Unidad 095 de la Universidad Pedagógica Nacional, Doctores, Maestros y compañeros profesores, alumnos que nos acompañan:

Me han conferido el honor de participar en esta Mesa en representación de los compañeros y compañeras de la primera generación de la Maestría en Educación Básica impartida en esta emblemática unidad;  y no podría decir que hablo en representación de todos  mis amigos y compañeros  de esta primera  generación, porque durante estos dos fructíferos y polémicos años,  pasados como un suspiro profundo y oxigenador de neuronas, cada uno de nosotros hemos  emprendido un camino de enriquecimiento personal y docente con múltiples matices y diferencias.

En él hemos podido compartir procesos mediadores de nuestros inolvidables maestros, doctores pero ante todo profesores. Ellos que nos siguen uniendo en experiencia de lectura interminable, intercambio de comentarios y opiniones, nos han dado momentos de embeleso, sufrimiento, entendimiento y desesperación. Con ellos compartimos grandes y significativos encuentros y desencuentros “que no es lo mismo pero es igual” como dice mi amado Silvio y mi estimado Maestro Gerardo.

Gracias a ellos y a muchos de los presentes, cada uno tenemos ahora una nueva historia que contar, con la que podemos renombrarnos y acercarnos al pasado y al futuro , pues son ellas, las historias, las que construyen nuestras vidas más que los propios átomos, según comenta  Eduardo Galeano en una  preciosa entrevista subida a You tube.

Esta historia compartida de la Intervención Pedagógica  en la que hemos puesto “sangre, sudor y lágrimas”, aunque suene algo dramático, nos ha permitido también enfrentar grandes retos y satisfacciones para poder transformar la mirada y apropiarnos de nuevas oportunidades de hacer  y ser  competente mediación docente para la reconstrucción educativa y social del “país de uno”, como lo define la reconocida politóloga  Denise Dresser .

Me permito leerles un párrafo de su  último libro  publicado en 2011 con el que cerré mi documento final para obtener la titulación:

“…A partir de hoy reconoceré que me toca dar algo de vuelta al país en el cual nací. Ya sea un poco de mi tiempo, algo de mi dinero, una porción de mi talento, una dosis de mi energía. Me comprometeré a ayudar a una organización cívica y donaré cierto número de horas a la semana. Reclutaré a mi familia, a mis amigos, a mis colegas para que participen en una causa…, o serviré a mi comunidad de cualquier manera. Porque si con mis acciones altero _ aunque sea por un milímetro_ la realidad de mi país, habrá sido un buen día. Y un buen comienzo.” (Pag. 336.)

Gracias.

*Egresada de la Maestría en Educación Básica de la UPN095 Azcapotzalco